México y el Reino Unido iniciaron el viernes la negociación de un nuevo acuerdo comercial posbrexit, destinado a remplazar al actual tratado heredado de la Unión Europea, anunció el gobierno británico en un comunicado, subrayando las “inmensas oportunidades” que presenta.
La secretaria de Economía mexicana, Tatiana Clouthier Carrillo, viajó a Londres para reunirse con la titular británica de Comercio Internacional, Anne-Marie Trevelyan, para quien “este acuerdo mejorado transformaría la relación con México, aprovechando al máximo las inmensas oportunidades que ofrece su dinámico panorama empresarial y su joven y creciente población”.
Los dos países ya habían firmado en diciembre de 2020 un acuerdo de continuidad reproduciendo las condiciones comerciales que mantenían antes del Brexit a partir del 1 de enero de 2021, fecha en que el Reino Unido abandonó totalmente la UE.
El objetivo de esta nueva negociación es ir “más lejos y profundizar” en una relación comercial que ya asciende a 4,000 millones de libras (5,000 millones de dólares), aumentando los intercambios en los sectores financiero, creativo, digital y tecnológicos.
México es el principal destino en América Latina para los productos alimenticios y bebidas del Reino Unido y el principal mercado para el whisky.
Londres destacó su importancia para los exportadores británicos, subrayando que su creciente población -prevista en casi 150 millones para 2035- implicará un aumento de la demanda de importaciones del 35% en la próxima década.
Destacó también su ubicación como puerta de entrada al resto de las Américas y a la región transpacífica, de fuerte interés para el Reino Unido, quien en febrero de 2021 presentó la solicitud formal de adhesión al tratado comercial transpacífico, integrado por 11 países -entre ellos México, Chile y Perú.
En comparación con las condiciones actuales, que ya implican 0% de aranceles para importación de bienes como automóviles, los negociadores británicos aspiran a conseguir reducciones arancelarias adicionales por valor de 57 millones de libras anuales y garantizar un comercio libre de aranceles para 97% de sus productos.
Reaccionando al inicio de la negociación, William Bain, responsable de las Cámaras Británicas de Comercio, destacó asimismo, entre otros “factores claves”, la necesidad de “sistemas eficaces de movilidad laboral y para viajes de negocios.
Las autoridades británicas afirmaron que, en el marco de un potencial acuerdo de libre comercio con México, intentará facilitar la circulación de los trabajadores entre los dos países.