El Fondo Monetario Internacional (FMI) anunció un nuevo instrumento crediticio para ayudar rápidamente a los países que se enfrenten a una situación de “inseguridad alimentaria aguda”, en medio de la alta inflación global.
La nueva Ventanilla para Shocks Alimentarios brindará acceso adicional a financiamiento de emergencia “para ayudar a las personas en países vulnerables a lidiar con una de las peores crisis de todas: el hambre”, afirmó la directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva, en un comunicado.
Los choques climáticos, las guerras y la pandemia de covid-19 han trastocado la producción y distribución de alimentos, “aumentando el costo de alimentar a las personas”, dijo.
Pero “la guerra de Rusia en Ucrania hizo subir aún más el precio de los alimentos y los fertilizantes”.
“Como resultado, una crisis alimentaria se está extendiendo por todo el mundo con un récord de 345 millones de personas cuyas vidas y medios de subsistencia están en peligro inmediato por la inseguridad alimentaria aguda”, advirtió Georgieva.
El nuevo instrumento funcionará durante un año. Según Georgieva se puede usar cuando las subvenciones y el financiamiento en condiciones favorables de los socios no son suficientes, o no es posible un programa respaldado por el Fondo.
Forma parte de dos programas de emergencia creados por el FMI para ayudar a los países a lidiar con los impactos de la pandemia: el Servicio de Crédito Rápido, que brinda préstamos sin intereses por hasta 10 años para los países más pobres; y el Instrumento de Financiamiento Rápido, que es para economías más ricas y debe ser reembolsado en cinco años como máximo.