Irán aseguró que sus fuerzas de defensa aérea están listas para proteger su espacio aéreo y advirtió que cualquier agresión a su cielo se encontrará con “golpes mortales”, en una clara alusión a una posible respuesta israelí o estadounidense a los ataques del sábado de Teherán contra Israel.
«El cielo de Irán no es seguro para los agresores, y si el enemigo comete un error en sus cálculos y viola el espacio aéreo de nuestro país, se encontrará con golpes mortales y ardientes por parte de los sistemas de defensa aérea del país», advirtió el comandante adjunto de la base de defensa aérea de Khatam al Anbiya, el general de brigada Qader Rahimzadeh, según informa la agencia estatal IRNA.
La Guardia Revolucionaria iraní atacó anoche con cientos de misiles y drones a Israel, en represalia por la agresión contra su consulado en Damasco, Siria, atribuido a Israel, en el que murieron seis sirios y siete miembros del cuerpo militar de élite, entre ellos dos generales.
Las autoridades iraníes, que dieron por concluidos los ataques contra el territorio israelí, han advertido que una acción de Israel contra Irán tendría una respuesta más contundente.
Horas después de las ofensivas de Teherán, Rahimzadeh afirmó que la Fuerza de Defensa Aérea del Ejército iraní y la Fuerza Aeroespacial de la Guardia Revolucionaria “están listas para proteger el espacio aéreo del país para todos los vuelos internos y autorizados que pasen por el cielo iraní.
Estas declaraciones se producen horas después de que la Organización de Aviación Civil de Irán anunciara la suspensión de los vuelos de varios aeropuertos a lo largo del país, entre ellos el Internacional Imam Jomeini de la capital iraní, hasta el lunes de madrugada.
EL MUNDO PIDE NO MÁS GUERRAS
En medio de la escalada de tensión entre Irán e Israel, la mayoría de los líderes mundiales han llamado a la contención para evitar una extensión del conflicto en Oriente Medio.
La Unión Europea (UE) avisó este domingo a Irán e Israel de que una mayor escalada de la tensión en Oriente Medio «no puede ser del interés de nadie» e instó a las partes a que «actúen con la máxima moderación».