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Rusia consternada ante uno de los ataques más mortíferos de Ucrania: murieron 63 soldados

Rusia reconoció el lunes que decenas de sus soldados murieron en uno de los ataques más mortíferos de la guerra en Ucrania, lo que provocó peticiones de blogueros nacionalistas para que los comandantes sean castigados por alojar a soldados junto a un arsenal.

El Ministerio de Defensa ruso informó que 63 soldados habían muerto en la explosión que destruyó un cuartel provisional en una antigua escuela de formación profesional en Makiivka, ciudad gemela de Donetsk, la capital regional ocupada por Rusia.

El Gobierno ruso dijo que las barracas habían sido alcanzadas por cuatro cohetes disparados desde lanzaderas HIMARS de fabricación estadounidense, y afirmó que dos cohetes habían sido derribados. Kiev afirmó que el número de muertos rusos se contaba por centenares, pero oficiales prorrusos dijeron que era una exageración.

Los blogueros militares rusos, muchos de ellos con cientos de miles de seguidores, afirmaron que la enorme destrucción se debió al almacenamiento de munición en el mismo edificio que un cuartel, a pesar de que los comandantes sabían que estaba al alcance de los cohetes ucranianos.

Por otra parte, Ucrania declaró el lunes que había derribado los 39 drones lanzados por Rusia en una tercera noche consecutiva de ataques aéreos contra objetivos civiles en Kiev y otras ciudades.

Las autoridades ucranianas afirmaron que su éxito demostraba que la táctica rusa de los últimos meses de lanzar ataques aéreos para derribar la infraestructura energética de Ucrania estaba fracasando cada vez más, a medida que Kiev refuerza sus defensas aéreas.

CADA ERROR TIENE UN NOMBRE

Imágenes no verificadas publicadas en Internet de las secuelas del ataque contra el cuartel ruso de Makiivka mostraban un enorme edificio reducido a escombros humeantes.

Igor Girkin, un excomandante de las tropas prorrusas en el este de Ucrania que se ha convertido en uno de los blogueros militares nacionalistas rusos de más alto perfil, dijo que el número de muertos se contaba por centenares, y más tarde modificó su mensaje para incluir a los heridos en esa cifra.

En el lugar se habían almacenado municiones y el material militar ruso no estaba camuflado, agregó Girkin.

Otro bloguero nacionalista, Rybar, publicó que se había confirmado que unos 70 soldados murieron y más de 100 resultaron heridos.

«Lo ocurrido en Makiivka es horrible», escribió Arcángel Spetznaz Z, otro bloguero militar ruso con más de 700.000 seguidores en Telegram.

«¿A quién se le ocurrió la idea de colocar a tanto personal en un edificio, donde hasta un tonto comprende que, aunque disparen con artillería, habrá muchos heridos o muertos?», escribió. A los mandos ‘les importa un bledo’ la munición almacenada en desorden en el campo de batalla», dijo. «Cada error tiene un nombre».

El reconocimiento por parte de Rusia de decenas de muertos en un incidente casi no tiene precedentes. Moscú rara vez publica cifras sobre sus bajas, y cuando lo hace suelen ser pocas: sólo reconoció una muerte entre una tripulación de cientos de personas cuando Ucrania hundió su crucero insignia Moskva en abril.

Rusia ha entrado en el nuevo año atacando en las noches las ciudades ucranianas, incluida Kiev, a cientos de kilómetros de las líneas del frente, en un cambio de táctica, después de meses en los que solía espaciar las andanadas cerca de una semana.

Tras disparar decenas de misiles el 31 de diciembre, Rusia lanzó docenas de drones Shahed de fabricación iraní el 1 y el 2 de enero, pero Kiev dijo el lunes que había derribado los 39 drones de la última oleada, 22 de ellos sobre la capital.

Kiev dijo que la nueva táctica era una señal de la desesperación de Rusia, ya que la capacidad de Ucrania para defender su espacio aéreo había mejorado.

«Ahora buscan rutas e intentan golpearnos de alguna manera, pero sus tácticas de terror no funcionarán. Nuestro cielo se convertirá en un escudo», declaró en Telegram el jefe del Estado Mayor Presidencial, Andriy Yermak.

En su último discurso nocturno, el presidente Volodímir Zelenski elogió a los ucranianos por mostrar gratitud a las tropas y entre ellos, y agregó que los esfuerzos de Rusia resultarían inútiles.

«Drones, misiles, todo lo demás no les ayudará», dijo refiriéndose a los rusos. «Porque estamos unidos. Ellos sólo están unidos por el miedo».

Rusia ha recurrido a los ataques aéreos masivos contra ciudades ucranianas desde que sufrió humillantes derrotas en el campo de batalla en la segunda mitad de 2022.

En un duro mensaje de Nochevieja filmado ante un grupo de personas vestidas con uniforme militar, Putin prometió no cejar en la guerra.

«Lo principal es el destino de Rusia», dijo Putin. «La defensa de la patria es nuestro deber sagrado para con nuestros antepasados y descendientes. La rectitud moral e histórica está de nuestro lado».